31 julio, 2009

Miedo

Siento la ausencia, los mas allegados sabeis que he estado de campamento, unos dias con la familia y otros perdido en el mundo.

Lo tenia desde hace tiempo...



miedo.
(Del lat. metus).
1. m. Perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.
2. m. Recelo o aprensión que alguien tiene de que le suceda algo contrario a lo que desea.


El miedo es un sentimiento contradictorio, nos facilita la vida, la evolución, nos evita daños y nos hace sufrir menos, pero a la vez, mal usado, nos niega el hacer cosas, nos limita en muchos ámbitos de nuestra vida.

Oí el otro día, que si el miedo domina tu vida, no tienes vida, solo miedo.

Para mi hay diferentes tipos de miedo.

MIEDOS BASICOS/INSTINTIVOS
A las serpientes, a las alturas, a la oscuridad, a la bruja averías (este es mi miedo infantil propio), Estos miedos hacen que el cuerpo se te encoja, los sentidos se revolucionan, el corazón se dispara, cada uno tenemos los nuestros y alguno de ellos se vencen y otros permanecen de alguna forma en nuestro interior para siempre.
MIEDOS SOCIALES
Son más que miedos, un cúmulo de pequeñas o grandes vergüenzas. Son dudas de no defraudar a las expectativas que pensamos hemos creado en la gente que nos rodea o que queremos crear a los que acabamos de conocer. Son miedos personales y estos nos suelen condicionar decisiones en nuestras vidas y, al fin y al cabo, nuestro día a día.

Nos han dicho padres, familias, amigos, entorno, ambientes, como debe ser nuestra vida, entonces nosotros desde nuestro criterio decidimos que cosas queremos hacer y como queremos ser y tenemos una vida para ir realizando estas metas que hemos aceptado como buenas y nos rodeamos de aquellos que son participes de estos preceptos.

Nos creamos un personaje, ese que ven nuestros compañeros de trabajo y nuestros conocidos, que descubren las personas que vamos conociendo y que nuestras familias van asimilando con el tiempo, aunque no lo compartan. Incluso de vez en cuando probamos cosas nuevas para ver que tal le quedan al personaje y poder incorporarlas o no al conjunto de nuestras “características”. Nos hacemos de derechas o de izquierdas, de fútbol o baloncesto, deportista o bohemio, pillador o metafísico, viajante o dominguero…toda la gente que nos rodea sabe que bebemos, como vestimos, que música nos gusta, que vemos en la tele, que hacemos en nuestro tiempo libre, que viajes hemos hecho y en que sitios hemos estado, que trabajo tenemos incluso lo que ganamos en el, el coche y la casa que tenemos o queremos tener, etc.

Tenemos la necesidad de ser únicos, diferentes, reconocibles incluso admirados y por supuesto necesitamos gustar y atraer. Por eso nos enrocamos en nuestro personaje, lo defendemos y lo revindicamos, es mas para hacer mas fuertes nuestras propias convicciones atacamos o ninguneamos las de los que son diferentes a las nuestras.

Un heavy no odia a Bustamante, simplemente, no le gusta, pero exagerara hasta el extremo sus comentarios para revindicar su heavismo(toma palabra queme acabo de inventar)


Si llevas toda la vida criticando a Antonio Gala y un día lees algo que te gusta de el, no lo dirás, callaras y cuando salga el tema pondrás a Antonio Gala a caer de un guindo.

Si has defendido en cada uno de tus quedadas con amigos y conocidos que lo de tener novia es de tontos, que es mejor salir de caza y ver una cara diferente de vez en cuando en tu cama y ser “libre”, el día que una persona te llegue y te llene, y repitas noche y día con la misma y en el fondo te guste y te haga feliz, no lo dirás, lo esconderás, porque no vas a negarte, no vas a llevar la contraria a ese personaje que has creado, tendrás miedo de que eso que te ha costado forjar durante tiempo se quebre aunque en el fondo fuese lo que quisieras hacer. Entonces lo tapas hasta que es insostenible o la dejas aun sin quererlo y exageras más tu personaje, no vaya a ser que se note, y sales más y pillas el doble, una elegante cortina de humo.

También puedes huir, lejos y cuanto mas lejos mejor, tu personaje vive tranquilo sin tener que dar cuentas a los que te conocen y encima conoces gente nueva a la cual empezar a mostrarte de nuevo sin que sepan nada de lo anterior, sin saber si eso que están descubriendo es coherente o no. Y con la gente nueva vuelves a mostrarte y vuelves a deslumbrar y a atraer…

En torno a nuestro personaje nos surgen muchos miedos y el grado de miedo depende de lo real que tu personaje sea.

Conozco gente, muy poquita, que su personaje es casi como son ellos en verdad, pero el resto tenemos muchas cosas de ficción, los primeros tienen pocos miedos porque su vida es como realmente quieren que sea y no les importa socialmente lo que les digan o saben que comportarse como uno es, no defrauda nunca, porque están convencidos de aquello que hacen, de aquello que son.

El resto vivimos cagados y hacemos cosas que nos liberen de esos miedos o que nos los oculten para poder vivir tranquilos.

Adelgazamos, por miedo a ser excluidos, a no gustar, a no atraer y nos compramos ropa que marque las tetas y haga mejor culo, y compramos gomina (yo no, esta claro) y nos pintamos la cara, o lo contrario, descuidamos nuestro aspecto porque nuestro personaje nos lo exige.


Nos compramos cosas, coches, teles, mp4, discos… para decir que lo tenemos, por miedo a que la gente que piense que somos raros, o que no quieran hacer cosas con nosotros si no las tenemos.

Nos ponemos objetivos públicos, decimos a todo el mundo aquellas cosas que queremos hacer en un futuro próximo o lejano. Aquí nos gustamos, porque al ser sueños o anhelos podemos decir cosas muy bonitas, exageradas, irreales, total, casi seguro que no lo haces y soñar es gratis y si encima le gusto con esto al de al lado con estas cosillas, pues eso que gano. Decimos que queremos tener un loft decorado según la revista esa que tienes en la habitación, o que queremos viajar por todo el mundo y ver muchos sitios y hacernos fotos en la mayor cantidad de sitios posibles, y queremos ir a Ibiza a bailar hasta el amanecer y follar en la playa con un pivon o con diez.

Hay que soñar y esta bien, simplemente a veces el personaje nos devora y hemos insistido tanto en ello que o lo cumplimos o la gente nos dejara de creer. Por lo que vivimos la vida, o lo intentamos, de nuestro personaje, no la nuestra, y lo mismo eras feliz con ese piso viejo del centro que se caía a trozos y no con un loft y te gusta ir al pueblo al bar de siempre a jugar a las cartas o a ver a tus amigos de siempre que ves muy de vez en cuando, aunque no puedas decir que has estado en Vietnam, Sudáfrica o en el Lago Victoria. Y lo mismo prefieres salir con tus amigos por los bares que conoces y follar en cama y con la misma persona porque en Ibiza lo único de lo que te acuerdas es que te llevaron a rastras de la borrachera.

Pero por miedo intentaremos hacer lo que hemos dicho o hecho con nuestro personaje hasta el punto de, a veces, negar lo que realmente somos. Estos miedos sociales no son peligrosos, al fin y al cabo vives y disfrutas, lo único que puede pasar es que dejes en el camino a gente que pudiera valer la pena y que con el tiempo te das cuenta y te jode, y la ves con otro chico o con otro grupo de amigos o haciendo bailes de salón que en el fondo era lo que siempre querrías haber hecho aunque en tu personaje dijiste que te encantaría hacer capoeira.

No pasa nada, el miedo nos dirá que nuestro personaje es lo primero, nos hará asimilarlo aunque no queramos, nadie lo sabrá, alguna vez lloraremos solos en nuestra habitación recordando las cagadas que hemos hecho y la gente que debería estar a nuestro lado y hemos echado de nuestra vida sin motivo. Y si alguna vez los volvemos a ver diremos cosas como: “me alegro de que te vaya bien”, “cuanto tiempo sin saber de ti”, “no era bueno para ti”, “sin mi seguro que te va mejor”, y no nos las creemos porque en el fondo sabemos que nos equivocamos y eso si que no se lo diremos nunca, el miedo nos hace cobardes. Y cuando se vuelve a ir o cuelgue el telefono o cierre el Messenger te dan ganas de llamarlo y decir ME EQUIVOQUE, pero no solemos reconocer nuestros propios errores, no nos gusta sentirnos vulnerables, reconocer aquello que salio mal por nuestra culpa.

Un inciso personal, hace ya tiempo, cada vez mas, una persona que fue algo especial o diferente, corrigió un “no, nunca”, reconoció un error, culpa mía por cierto, lo cual agradezco porque a mi me hizo feliz y ella creo que venció muchos miedos con ello, me dejo atrás, posiblemente porque otros miedos siguen atándola. Su personaje se fue a vivir una vida que sueña pero que yo no se si realmente es la que quiere vivir, sea como fuere, MUCHA SUERTE.

“Si el miedo domina tu vida, no tienes vida, solo miedo” Tengo muchos miedos, pero creo que desde hace un tiempo deje de tener solo miedo.

06 julio, 2009

De Leon al cielo


Acabo de volver de una aventura que empezó en León, mil gracias por todo al ser que me acogio y mimo esos días, mas adelante trascenderá, mientras...Gracias. Y acabó en Palencia, con La Fuga, noche inolvidable, los que estuvimos lo sabemos.
Hoy solo saludar hablare de la aventura mas adelante.

Las lagrimas se nos fueron con esto...

http://www.youtube.com/watch?v=hz90lh73Sms&feature=PlayList&p=EAF88B40626BBCD9&index=22


http://www.youtube.com/watch?v=9PVSUGYvdAA&feature=related